Relatos de una Conchuda, reloaded!

Sobre los miedos...

Anoche no podía dormir, mi insomnio una vez más me vino a visitar...
Pensé tanto...me detuve en los miedos.

Todos tenemos miedos...

Mi mayor miedo es despertar un día y no sentir la presencia física de mis padres.
Me aterra saber que la vida en algún momento los va a alejar de mí.
Miedo a no progresar, no poder ser eso que la sociedad necesita que sea...
Miedo a que mi cuerpo enferme, a no despertar...
Miedo al paso del tiempo. Al compromiso...
A la aceptación de los demás, pero sobre todo a la de uno mismo.
No quisiera mirarme al espejo y ver un reflejo de algo que no soy, debe ser tan triste.
Miedo a dar amor y salir lastimado en el intento.

Fue en medio de todos esos pensamientos cuando me pregunte ¿cuál era la gracia de tener tantos miedos?,

Si el miedo más grande de todo ser humano, creo yo, que es dejar de vivir.

Hoy desperté una vez más, en un cuerpo sano, con la mirada de mis padres.
Tuve la dicha de caminar, sentir la brisa tenue de la mañana...soy dueña de un cuerpo sano!
Tengo la suerte de trabajar en algo que me apasiona.
El paso del tiempo solo me lleno de experiencias, me mire al espejo y vi el reflejo más lindo que podía ver de mi misma. El más honesto.

Me vi, me acepte y salí sonriente una vez más a la vida…

Me abrí sin darme cuenta una vez más al amor y se siente increíble.
Tengo la aceptación de mis amigos, que con mis virtudes y mis defectos siguen ahí…

¿Qué más puedo pedir?

El miedo más grande que puede existir en una persona es el miedo a vivir, a disfrutar el día a día.

Las tristezas, los desafíos, las derrotas...solo son un aprendizaje más.