martes, 6 de febrero de 2018

Hace unos días, tome unas vacaciones, después de muchos años sin viajar.
En los 15 días que estuve lejos de la rutina reflexioné bastante...
Una mañana me encontré sentada en una montaña a 2.500 metros de altura.
Miré el paisaje, jamás había visto algo igual y juro que me sentí minúscula...
De pronto, me vi ahí, rodeada de tremenda inmensidad, respire una enorme bocanada y cuando incliné mi cabeza, ahí estaban ellos. ¡Mis viejos!
Los vi y pensé, que bueno es poder estar acá, poder compartir esto con ellos.
¿Cuántas veces, en la convivencia, la rutina, en lo cotidiano dejamos pasar por alto estos detalles?
¿Cuántos de nosotros, por estar en modo automático, dejamos pasar lo lindo, lo que está ahí?
Yo tuve la suerte, la enorme dicha de poder frenar mi cabeza en ese momento en que los vi y agradecer...
Estamos de paso, vivamos apreciando lo que hoy está, lo que tenemos. El resto no importa.
Hoy, particularmente, salí de mi trabajo y decidí caminar...
Disfrute ese rato.
Mientras escuchaba "Desastre" de Cerati, pensaba lo bueno y la suerte que tenía de estar caminando y eso, que no tuve el mejor de mis días y mi calzado no era el adecuado.
Pero estaba ahí, pertenecía a la misma masa que caminaba a mi alrededor.
Me volví a aislar...me detuve unos 15 minutos en la plazoleta que tenía más cerca, empecé a observar mi entorno.
De pronto, mi mirada se detuvo en el juego de una mujer y un chiquitín.
A el nene se lo veía muy contento, la mujer, pese a que parecía sofocada, miraba a ese chico de una manera increíble. Las sonrisas de ambos destacaban entre la multitud.
Aunque debo admitir,que cada tanto, la visual era interrumpida por algún que otro transeúnte apresurado.
Yo seguí ahí, un rato más, mirando...
Por suerte, no había ningún "tictac" pisando mis talones.
Hay instantes que nos regala la vida, instantes para realmente abrir los ojos y "parar la moto".
Llegue a casa después de caminar por dos horas.
Apenas entre, vi por la tele que anunciaban el fallecimiento de Débora Pérez Volpi (QEPD).
Al ver la noticia, se me terminó de dar vuelta la cabeza.
Salgamos de la pausa, tengamos la capacidad de corrernos de lo que no suma.
Dejemos de lado lo superficial. Los rencores, el EGO.
Sobre todo el ego.
No importan la mitad de las cosas por las que corremos a diario. No carguemos problemas extra en la mochila, porque todo tiene solución, menos la muerte.
Los desamores, las peleas, el trabajo, la situación económica...todo eso, sin dudarlo tiene solución.
A corto o largo plazo, con más o menos esfuerzo, pero la tiene!
Lo que no lo tiene, es la muerte.
Valora cada segundo, valora la compañía que tenes hoy.
Disfruta tu trabajo, tus amistades.
Agradece si gozas de buena salud y no te falta el plato de comida.
Rodéate de lo real, pero sobre todo, sé auténtico.
Actúa con el corazón, aunque quedes en ridículo.
Reíte y que cada carcajada resuene en un enorme eco.
Juntate con tus amigos, aunque sea un LUNES!
Come, no importa si te pasaste unos kilos...
Y si tienes la dicha de probar sabores nuevos, HACELO!
No todos pueden darse ese lujo!
Viaja, que no te de miedo. Conoce otras culturas, otras realidades, PERO SOBRE TODO, CONOCETE A VOS MISMO!
Que ningún reloj te juegue una mala pasada. Se vos, se libre...
Enojate menos, perdona más.
Actúa con el corazón, aunque tengas miedo que lo rompan.
Jugatela, quien no participa, nunca gana.
Disfruta el instante.
Cuida al que querés, al que te quiere...no todos tienen la dicha de tener a alguien que se preocupe por uno.
Que la vida te permita equivocarte y aprender de cada error...
Que la vida te regale las mejores enseñanzas.
Vacía tu mochila de rencores, prejuicios, miedos.
Llevate lo fundamental...
El amor de los afectos, los aprendizajes y recuerdos...
El resto, es prestado.

martes, 12 de diciembre de 2017

Reflexiones de fin de año!

Llegó diciembre y con él, mí inevitable balance anual.
Hay quienes, tal vez, les interese leer estas líneas, hay quienes lo van a pasar por alto. (Y está permitido).
Comencé el año rodeada de ellas...mis amigas.
Las personas que sostienen mi mano hace muchos, muchísimos años.
Recuerdo qué me paré en una silla y bajé con el pie derecho, deseando muy en mí interior un excelente 2017.
Entendí que no hay que ponerse más peso del necesario.
Que los momentos malos suceden y si uno le pone mucho huevo, se superan y te dejan la mejor de las enseñanzas.
Y qué cuando menos lo esperas, los reencuentros aparecen, sin necesidad de dar explicaciones.
Derrotas, llantos, risas...ganas de mandar todo al carajo y ganas de volver a empezar con más garra, más sabiduría.
Si, suena pedante. Pero es la verdad y está buenísimo como se siente!
Porqué pese a todo, sigo conservando mis principios, mis ideales.
Mis hnos. Qué aunque choquemos, lo son todo y siempre van a estar en un lugar especial de mi vida. Mi historia.
Mis amistades...los de siempre y los nuevos.
Un trabajo que me gusta!
La música, mis tangos, el fútbol (sobre todo mi boca querido)
Las charlas, esas qué te desvelan...
El amor... siempre el amor!
Me detuve a mirar mi interior, me busqué, me encontré y todo lo que hoy veo, merece mi agradecimiento.
Hoy, a pocos días de cerrarlo puedo dar gracias por otro año más!
No fue fácil, pero acá estamos...
AGRADECIENDO, siempre agradecida!
Un año, que sin duda fué de mucho aprendizaje.
Un año dónde la salud de las dos personas que más admiro estuvo en juego...mis viejos!
Doy gracias de poder tenerlos junto a mí y tenerlos vitales!
Los amo, ustedes lo son todo!
Son mi mundo y mí mejor escuela.
Un año, dónde entendí qué hay que superar los enojos, porque detrás de cada uno de ellos, solo hay dolor.
Aprendí a perdonar, pero sobre todo, a perdonarme.
Aprendí, que las distancias, no siempre son "olvidó".
Qué el amor sí es mutuo y genuino no necesita mucho preámbulo y para manifestarlo solo basta fundirse en un abrazo!
Aprendí, que no hay obstáculos más grandes que los que uno solo pone en su mente. Qué si tenés la capacidad de correrlos de lado nada es imposible.
Esté fué un gran año!
Lleno de nuevas experiencias, aprendizajes, amores, triunfos...
Un año especial, llegué a mis 30 años y estoy orgullosa de mi misma...
Me aplaudo por los resultados obtenidos. Sobre todo, porque no fueron ambiciosos.
PARA SER FELIZ NO NECESITAMOS TANTO!
Las risas de mis sobrinos/as y sobrina nieta, las miradas de mis viejos.
Volver a la radio y a tener esas charlas de previa producción que reconfortan el alma de cualquiera. Poder compartir eso y sobre todo, poder hacerlo con esos tres grandes amigos, no tiene precio!
Hace un tiempo que paré la moto...
Por eso, GRACIAS 2017!

lunes, 14 de agosto de 2017

En vísperas de mis 30 años


Estoy a muy pocos días de cambiar de década, ¡Se vienen los 30 años!
Lejos estoy de deprimirme, aunque debo admitir que el término "Señora "me sienta medio mal.
Cómo que todavía no logro amigarme con esa palabrita de 6 letras.
Bastante difícil me resulto cargar a mis 13 años con el apodo de "Nona". Ni hablar de las prematuras canas...
Fui tía por primera vez a los 4 años, tía abuela a los 26 años. Si sigo así, no llego a los 40!!! ( Na, chisteeee)
Aunque ahora que lo pienso mejor, mi apodo no estuvo nada mal y con los años aprendí a quererlo.
Con los años, aprendí muchas cosas...
Aprendí que los enojos no pueden ser eternos.
La importancia del poder perdonar
Entendí que los afectos no siempre permanecen para siempre. Algunas personas cambian de rumbo, llegan a nuestras vidas, nos sacuden y se van dejando una enseñanza o un gran recuerdo.
Entendí, y me costó bastante, que mis padres no son eternos. Me amigue con eso y poder comprender eso me enseñó a darles valor a los instantes.
Pucha que tenemos lindos momentos, las sonrisas de los que queremos, ver sus crecimientos, progresos. Qué lindo que es sentirnos queridos, que nos tengan en cuenta!
Con los años me amigué con mis fracasos. Durante mucho tiempo los sentí como un gran peso, hasta que pude entender la enseñanza que había detrás de cada uno de ellos.
Aprendí a escuchar...
¡Cuantos, de nosotros, muchas veces solo necesitamos que alguien nos escuche!
Aprendí a decir que no, sin sentirme mal por ello.
Con los años, me volví más auténtica.
Entendí la famosa frase: "quién te quiere, te busca".
También, comprendí que la actitud es una pequeña cosa, que hace una gran diferencia. Aunque, muchas veces el costo que tenemos que pagar por tenerla sea muy alto.
Entendí que siempre, si se quiere, se puede ayudar al otro. (Y no hablo precisamente de ayuda económica).
Aprendí que la palabra ambición no tiene por qué ser mala. La definición que brinda el diccionario dice: "Deseo intenso y vehemente de conseguir una cosa difícil de lograr".
Ojo, puede ser una cualidad muy positiva en ojos de algunos, y una muestra de competitividad desmedida para otros.
No hay nada malo en querer prosperar, eso sí, siempre y cuando uno sea respetuoso con los demás y honrado en su forma de actuar.
A mis casi 30 años, valoro mucho más los principios que me inculcaron mis padres.
Lo importante que es el respeto, para con los demás, pero, sobre todo, para con uno mismo.
La verdad, no tengo nada de que quejarme. Nada de que arrepentirme. Puedo considerarme, sin lugar a dudas, ¡una mujer AFORTUNADA!
Ahora sí,pueden llamarme SEÑORA!!!

martes, 4 de julio de 2017

Cuando dejamos de escondernos de nosotros mismos.


Hay momentos en la vida en la que empezamos a querernos ver cada día más auténticos.
Al menos eso me pasa a mí!
Llegué a una etapa de mi vida, en la que todo empezó a ser valorado desde otra perspectiva.
Donde todo empezó a tener un porqué.
Hoy me veo diferente, quizá, quién dice, empecé crecer!


Me descubrí una vez más, me miré y vi que estaba viviendo algo que no quería y no podía ser...


Cuántas veces, algún temor nos lleva a aceptar eso?, Si, eso que sabes que no sos, pero tal vez otros esperan o te piden que seas?
Te lo pide el día a día, la sociedad, incluso, esa imperiosa necesidad de poseer más.


No hace mucho que decidí reencontrarme conmigo misma, me paré frente al espejo y me banque el reflejo de verme.
De ver eso que soy, eso que esperaba ser y eso, en lo que me deje ser.

Y la verdad, no me gustó, mi sonrisa no era autentica. Incluso mi mirada.

Cuántas veces al día, te miras y te cuestionas si sos eso que querés ser?
Lo pensas?

Por momentos me siento tan Virgo, siempre analizando todo!!!

Que fácil suena, no?, pero que difícil es hacerlo!
A medida que vamos creciendo, los sentimientos empiezan a ser una pesada carga. Ni hablar del accionar cotidiano. De los miedos, las derrotas, los triunfos, los afectos.
Todo accionar nos condiciona.
La única meta, creo yo, indispensable en la vida de todo ser humano, es la capacidad de aceptarse y permitirse ser...
Ser capaz de tolerar el reflejo que da el espejo, ser lo suficientemente fuerte y dejarse de esconder de uno.
Dedicarse unos minutos para permitirse darle valor a lo importante.
Hoy me permito ser...
Me permito ser menos quejosa y disfrutar más.
Empecé a detenerme en los instantes...
Un instante contemplando la risa de mis viejos, pucha que hoy valoro el tenerlos vivos!!!
Un instante de jugar en el piso con mis sobrinos, sin importar que sucios pueden quedar mis pantalones.
Un instante para disfrutar de una rica comida.
Un instante compartido con esas personas que elegimos y nos eligen...LOS AMIGOS.
Un instante para salir a caminar y dejar que el viento me despeine.
Un instante para poder pedir perdón y dar gracias. Sobre todo, DAR GRACIAS!
Un instante para añorar, para llorar mis penas.
Un instante para enamorarme, incluso de lo prohibido.
Un instante para escuchar a quien necesita ser escuchado.
Un instante para fundirme en un abrazo.
Un instante para sentarme a volar con la mente, para escribir...
Un instante para cantar algún tango
Un instante para hacer alguna travesura, humorada...incluso, una ridiculez!
Un instante para no esconderme.
En este último tiempo aprendí a sumar instantes para disfrutar eso que tantas veces se nos escapa de las manos...
LA VIDA!

domingo, 12 de junio de 2016

CUANDO YA NO TENES 20 AÑOS!!!
Hoy tuve un instante para analizar un poco mi vida actual.
Me di cuenta que este ultimo año y medio decayó en picada.
En todo este tiempo de poca expresión, mis canas aumentaron notablemente,
Mi humor decayó, junto con mi culo y otras partes de mi cuerpo.
En la semana ya no salgo porque quedo estúpida toda la semana (más de lo habitual).
La máxima diversión de la semana es ir a la radio.
Cambie los viernes de varieté y cerveza por té de jengibre y novelas pedorras.
Los sábados ya no son el día más esperado de la semana. Si salgo a bailar (cosa que sucede poco), no conozco ni un puto tema, esquivo a todo hombre desconocido y termino puteando como una anciana en la fila para ir al baño. Posta, no entiendo porque se hacen esas filas tan largas!
Los domingos, si salí la noche anterior, suelo padecerlo y créanme que bastante!
Si no salí, elijo películas increíblemente deprimentes, por ejemplo: "Como ser soltera"
La única pelotuda que ve ese tipo de películas, un domingo, estando soltera soy yo, no?
Ojo, si estoy muy, muy deprimida, me miro " La vida es bella" y quedo para el corchazo!
También tengo esos domingos en los que me hago la deportista, agarro la bici y pedaleo.
Pero ya no tengo 20 años, al otro día me duele todo y tengo que entrarle al diclofenac con pridinol, Bengue, bolsa eléctrica, B12 y todo lo que sea necesario para sacar el dolor!
Antes me preocupaba solo por la celulitis...
Ahora la lista también incluye estrías, flacidez, canas, re secamiento en los talonesss., pueden creerlo??? Empecé a ir al podólogo, si, al PO-DÓ-LO-GO!!!
GENÉTICA DE MIERDA!
Mis sobrinos ya no me ven como su par, me ven como la tía mayor.
La cuestión es que el otro día, mi pequeña sobrina de diez años, formulo en su inocente cabecita, las dos preguntas más conchudas que te pueden hacer en tu vida.
Mientras veía como me maquillaba para ir a una entrevista laboral, (Aparte de canosa, soltera, con poca onda y flácida, estoy desempleada), me dijo:
- Que linda estás! Te arreglas para conseguir novio?, Porque todavía no estás casada?
Cuando termino su cuestionario, note que el delineado de mi ojo derecho me había salido para el reverendo culo, claro, de golpe hasta el pulso se me fue al carajo!
Fue en ese entonces cuando me di cuenta que ya no tenía 20 años..
Note que hacía más de un año y medio que no publicaba este tipo de expresiones...muy mías, por cierto.
Creo que las mismas dejaron de salir a la luz cuanto finalizo mi romance con el ex taxi boy.
Todo ese momento en que deje de canalizar mediante relatos mi ira, envejecí. Y para colmo, me volví más boluda...
Tan boluda que una vez más deje que el pelotudo de Cupido se divierta flechándome con otro goma más, que un día se despertó y se dio cuenta que no estaba para una relación, justo después de que me había presentado a toda su familia. Y ya saben, soy tan boluda que me encariñe. Ahora no solo lo extraño al boludo este, también a la familia!
Si al menos esas putas flechas me desinflaran un poco...
Pero no, solo me rompen el corazón, me agarran angustia y me como la heladera.
A los 20 años los duelos eran más cortos. Ya de por sí, no te podían clavar el visto, ni bloquearte ni nada de esas putas nuevas tecnologías. A lo sumo, te quedabas pensando que nunca había recibido ese mensaje de texto que decía: Te extraño!
Claramente eso no se tiene que hacer.
Anotación mental: NOOO MANDAR MENSAJES A UN EX, JAMAS!!!
Y menos después de ver esa puta película "como ser soltera".
La única verdad, es que a los 20 años ganaba más. Las carnes estaban firmes, la cabeza fresca, el corazón era virgen. No tenía canas, podía salir a bailar hasta las 8:00am y al otro día pedalear hasta Lujan que no sentía un mínimo dolor, y para suma de males, ser soltera no estaba mal visto, curtía más y sufría menos...



martes, 26 de enero de 2016

Hoy me levante con los cables erróneamente conectados.
 A decir verdad siempre me despierto igual de loca.

Fui a mi trabajo, camine las pocas cuadras que hago a diario para llegar al mismo.

Eran las nueve menos diez, me había levantado con la idea de comerme el mundo, pero el mundo me comió a mí.
Bastaron unos pocos instantes para que mi humor desaparezca por completo.

Hay dos momentos cruciales en a vida de una mujer...
Bueno, la verdad es que son varios,  dependen del día en que nos encontremos hormonalmente.

Tu primera cana es uno de ellos. Aunque debo confesar que ya estoy curada de espanto, si tengo en cuenta que el 40% de mi cabello crece de color blanco.

El otro, no menos importante es el momento en que te percatas que ya la sociedad no te ve más como una adolescente.

Hoy, particularmente hoy, los planetas se alinearon junto con los pelotudos para hacerme sentir mal.

Volviendo al relato, el primer indicio de que mi día iba a ser una mierda, fue cuando pasen por esa obra y el muchacho que cargaba pala me dice.:

Pero que linda es usted, señora!

A ver si nos entendemos, esta todo bien con tirarle flores respetuosamente a las mujeres, pero era necesario agregar el señora?

Continúe mi marcha, pensando en que momento pase de ser señorita a ser señora, tengo apenas 28 años infeliz!

Y yo que había pasado por esa construcción para que me levantaran el ánimo con algún piropo...

Luego de carburar todo el día en el trabajo, llegue a mi casa y decidí salir a caminar.

Me puse las calzas, mi remera deportiva , zapatillas y salí a comerme al mundo...

Pense que era una buena forma de levantar mi animo, después de que te digan "no sos vos, soy yo" por décima novena vez en tu vida y fracasar una vez más a nivel sentimental, di por sentado que hacer un poco de ejercicio no me iba a venir nada mal.

Pero como siempre digo, tengo el cerebro conectado con el culo y cada vez que pienso algo, la cago!

Salí escuchando música, camine de corrido una hora, a buen ritmo.

Ya de regreso, la batería de mi celular estaba agotada. Saque mis auriculares metros antes de  pasar por un grupito de deportistas, fue en ese entonces cuando escuchó:

"Mira que buena esta esa mina", se mantiene la señora EH!

Conté hasta veinte, respiré profundo tratando de contener todas las palabrotas que me vinieron a la mente.

Tuve ganas de decirle, señora tu vieja boludo!

Pero me la banque, elegí volcar toda esa ira en otro relato.

Ahora me planteó lo siguiente,:

No se que es peor, que te digan  " no sos vos, soy yo" o que te digan "señora".

Ambas frases pueden cagarte un toque la existencia!
Se hace difícil no pensarte, decirle a la cabeza que entienda de una vez que es necesario no saber de vos.

Que entienda que lo mejor y lo más sano es tomar distancia...

Que entienda que hay veces en las que es más sano dejarlo ir.

Pero hablemos del corazón.

Cómo explicarle que deje de sentir?

Cómo borrar de un día para el otro los recuerdos, los momentos?

Que sensación más horrible esta de querer y no poder.

No se trata de un capricho.

Los caprichos son sólo caprichos.

Se trata de algo más profundo...

Uno pasa la vida imaginando un futuro.
Uno proyecta, especula realidades.

Y un día, como quién no quiere la cosa, el destino se te presenta con otra carta.
Aparece esa persona que no estaba en tus planes.

Con los temores lógicos dejas que entre en tu vida, en tus momentos, tu cabeza y tu corazón.

Es la sensación  mas linda!

Pero seamos realistas, no todos valoramos el amor...

Existen personas que escapan de el.

Esas mismas personas suelen sentir temor.

Lo más triste de cuando esto ocurre, es no darle la oportunidad.

Cómo desenvolvernos ante el rechazó?

Quién es rechazado, no sólo carga con el recuerdo de lo que fue, lleva consigo también  el dolor de  lo que le impidieron que fuera.

Abrirse al amor no es nada fácil, menos cuando uno tiene un pasado.

Aparecen los temores, las preguntas!

Abrirse implica dejar los egos.

Ya no estamos solos, pero dejarse querer cuesta.

Muchas personas desean ese amor, que sepa compartir y contener.
Y cuando esto sucede, lo rechazan.

Un auto-boicot.

La vida es una enorme vía de tren, en el viaje tenemos mil estaciones, van a subir y bajar varias personas.

Incluso, va a llegar un día en que nosotros ya no formemos parte del viaje.

Lo importante es ser lo suficientemente capas de ver quién es capas de viajar junto a nosotros, quién puede tolerar nuestro equipaje. Incluso, ayudar a que sea más ligero su peso.

Somos dueños de nuestro destino, nuestro viaje...

Abrí los ojos, abrí el corazón y preguntate qué tan placentero puede ser viajar, si se coincide con el compañero correcto!

No tengas temor, date la oportunidad, dale a quién ofrece ayudar con tus cargas.

Nadie nos  asegura que sea quién comparta nuestro viaje hasta el final, pero puede ser quien haga de el un viaje más ameno!